top of page

¿Qué está pasando con los socialistas europeos?

  • José Ignacio Villar (@villarromeroig)
  • 16 may 2017
  • 3 Min. de lectura

Los socialdemócratas europeos se encuentran en la que quizás pueda ser su peor situación desde el nacimiento de la Unión Europea. Sus resultados electorales comenzaron a caer hace una década, tocando actualmente mínimos históricos.

Tras la victoria de Emmanuel Macron, los socialistas franceses temen una auténtica ruptura. En la primera vuelta, su candidato Benoît Hamon logró tan sólo algo más del 6% de los votos, datos pésimos en comparación con el 28% conseguido por Hollande en las anteriores elecciones presidenciales de 2012. Una quiebra en dos amenaza al Partido Socialista; el propio Hamon ha anunciado que creará este verano un nuevo movimiento que regenere la izquierda, el que sería un nuevo protopartido de oposición al nuevo gobierno liberal-centrista de Macron. Por otro lado, el hasta ahora premier galo Manuel Valls ha mostrado su intención de ser el candidato de En Marche (el partido de Macron) a las elecciones legislativas. Algunos lo han tachado de oportunista, pues Valls perdió frente a Hamon las primarias de su partido.

Italia, habituada a un escenario político caótico, vivió como Matteo Renzi presentó un referéndum reformista y lo perdió en las urnas. El socialista y exalcalde de Florencia se vio obligado a dimitir, sustituyéndolo su ministro de Exteriores Paolo Gentiloni. El 30 de abril se celebraron primarias en el Partido Democrático (los históricos socialistas italianos) en las que Renzi conservó su poder dentro del partido frente al ministro de Justicia Andrea Orlando y Michele Emiliano, gobernador de la Apulia. A la espera de la convocatoria de nuevas elecciones, Renzi quiere volver a ser Primer Ministro. Sin embargo, los sondeos pronostican un fuerte avance del Movimiento Cinco Estrellas, un partido “atrapatodo” liderado por Beppe Grillo que tambalea los cimientos del sistema.

Martin Schulz, veterano político alemán y líder del Partido de los Socialistas Europeos, dejó la presidencia del parlamento de la Unión para batirse a Merkel en las elecciones de septiembre. En Alemania, algunas encuestas han señalado que Schulz podría arrebatar la cancillería al centro-derecha después de doce años de gobierno de la CDU. Además adelantan el resurgir de la extrema-derecha en el país, por lo que el populismo resucita ahora en el país germano. No obstante, Merkel ha conseguido importantes victorias territoriales en las últimas semanas, aparentando así partir desde una posición igualada a la de Schulz, mirando de reojo el ascenso de los extremistas.

Cruzando el Canal de la Mancha, los británicos son testigos de cómo los laboristas de Jeremy Corbyn podrían pegarse un nuevo batacazo frente a las elecciones de junio. El poder de los Tories (conservadores) hace sombra a los proyectos izquierdistas de Corbyn.

En el resto de países, los socialdemócratas han perdido el liderazgo desde 2007 en algunas naciones como Austria o Grecia, aunque el año pasado los socialistas portugueses se alzaron con el poder con la figura de António Costa tras un pacto con el resto de las izquierdas.

¿Espejos del PSOE?

Muchos comparan ya la grave crisis que padecen los socialdemócratas franceses y británicos con la situación actual del PSOE. Desde 2008, los socialistas españoles han perdido más de veinte puntos en las elecciones generales. Al igual que en Francia salieron muy mal parados de su proceso de primarias, muchos temen que en España ocurra lo mismo y que el voto del centro-izquierda español se diluya entre Podemos, Ciudadanos y nacionalistas. Algunos relacionan una posible victoria de Pedro Sánchez con el fracaso de Hamon, aunque los últimos estudios de voto muestran que recibiría más apoyo en las urnas que Susana Díaz y Patxi López. Desde otra perspectiva, el áspero tono y las fuertes divisiones dentro del seno socialista español parecen ser más profundas que en el resto de países, por lo que desde este sentido la amenaza al PSOE es mayor. Recordemos que fue el propio partido quién destituyó a su Secretario General, estableciendo una gestora que decidió la abstención al gobierno de Rajoy. Asimismo, el duro e incómodo debate a tres del pasado lunes entre los candidatos escenificó tal ambiente de división e incluso rencor por las últimas decisiones tomadas.

En definitiva, el PSOE debe saber medir el efecto de sus primarias si no quiere vivir un cisma similar al que parecen acercarse los socialistas galos. El centro-izquierda europeo vive un momento en el que el populismo alcanza un apogeo que no se veía desde hacía décadas, mientras que el centro-derecha y los liberales-centristas parecen resistir al cenit de los que hoy reavivan viejos fantasmas del pasado.

Comments


© 2023 por "Lo Justo". Creado con Wix.com

bottom of page